alias El Negro, un presunto jefe de la disidencia del frente 33 las Farc , Ni su perro campanero lo libró de morir

Durante dos meses, la inteligencia del Ejército siguió a alias El Negro, un presunto jefe de la disidencia del frente 33 las Farc, que murió tras enfrentarse a los soldados y policías que llegaron a capturarlo, en la vereda Vijagual, de Teorama, Norte de Santander.

“Teníamos el sitio exacto donde él se encontraba y conocimos su rutina, los movimientos que hacía, su esquema de seguridad. Esta es una operación con minucia de la información”, precisó una fuente judicial.

Y es que su perro rottweiler que dormía al lado de El Negro, lo alertó con los ladridos, cuando sintió que las tropas llegaron.

“La mascota lo alerta y él sale armado y a pesar de que se le dio la opción de que se rindiera, inició a disparar y por eso nuestros hombres respondieron neutralizándolo”, precisó la fuente.

Las autoridades aprehendieron a una mujer, que estaba armada, y a tres menores de edad, que integraban las filas de esta organización criminal, activándose la ruta de atención para el restablecimiento de sus derechos.

En medio del operativo fueron incautados cinco fusiles, una ametralladora, seis proveedores para fusil, dos pistolas y seis equipos de campaña.

Cuando las autoridades salían de la zona desde una vivienda de esa vereda, un francotirador los atacó, hiriendo de un disparo al soldado Jeison Estiven Gracia Cedeño, quien, a pesar de los esfuerzos para mantenerlo con vida, no resistió y murió.

Entre los delitos que las autoridades responsabilizan a alias El Negro, está el asesinato de Ángelo José Ibarra Garay, quien era integrante de la Red de Apoyo al Terrorismo (RAER), ocurrido el 2 de junio del 2019, en Teorama.

En febrero del 2020, este jefe habría direccionado la instalación de un campo minado en el barrio Nueva Esperanza, de Convención.

Para agosto de ese mismo año, las autoridades lo responsabilizaron de atacar la base militar La Esperanza, también de Convención.

Y, por último, este jefe guerrillero habría participado de un combate en la vereda Pompayo, de Teorama, que se registró el 7 de julio.

Dos días después, mandó a instalar dos cilindros bomba en inmediaciones de una escuela de la vereda Alta Gracia, de ese mismo municipio.