La prórroga de la cuarentena para hacerle frente a la “pandemia del coronavirus”, decretada en un comienzo hasta el 13 de abril, deberá ampliarse durante algunas semanas.
Dejar el confinamiento nacional de todos en sus viviendas, por apenas 8 días más, sería algo aventuradamente irresponsable, pues los contagios a raíz de los pocos exámenes iniciales están subestimados, y, esto es muy riesgoso.
Para destacar, que a la fecha el porcentaje de muertes en Colombia es del 1.63% sobre el total de contagios, mientras que a nivel mundial esta cifra ya está en el 5.4%, lo que indica que la “cuarentena” empezó cuanto el número de contagios se aproximaba a los 400 y muchas eran las clínicas y hospitales que ya estaban aplicando en pacientes de máximos cuidados las terapias de azitromicina e hidroxi- cloro- quina de excelentes resultados en países como China y Francia, entre otros.
Sin embargo, el éxito del “encierro nacional” también se ha fundamentado en el oportuno suministro de mercados a las familias más pobres, pues con hambre todos en estampida salen de casa.
Pese a todo, el gobierno ha fallado en los auxilios a extraordinarios generadores de empleo; hablo de la micro, pequeña y mediana empresa, que están a la deriva.
Tras estas consideraciones, la crisis económica y social puede ser más grave y por muchos años, que el drama sanitario que se desprenda del “coronavirus”.
Cualquier equivocado procedimiento, ocasionaría más muertes por hambre y miseria que la misma tenebrosa pandemia.
Así se diga que la “cuarentena” deberá prolongarse pasado el 13 de abril, extenderla excesivamente hasta junio, sería errático, lo uno por la catástrofe del desempleo y, porque si tras dos meses de cuarentena los contagios no ceden, habrá que preguntarse si el, obligado enclaustramiento sirvió para algo.
Aunque resulta tempranero tomar ya decisión alguna sobre estas cosas, muy interesante dar comienzo al debate que defina las medidas que se deberán aplicar para la suspensión proporcional de la “cuarentena o confinamiento” en el que nos encontramos.