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Debes ser humilde cuando te vean subir, para que no te traten con desprecio cuando te vean bajar”, Empieza el calvario para los mandatarios

Nadie es eterno en el mundo’ dice la canción de Darío Gómez, al recordar que todos nacimos para vivir, sufrir, gozar y morir, de acuerdo con las circunstancias que hayan rodeado nuestra agitada existencia.
A las puertas de un cementerio había una inscripción en latín que decía: ‘vanitas, vanitatem et omnia vanitas’. ¡Aquí terminan todas las vanidades del mundo!
Quien iba a pensar que los planes de muchos proyectos, mal adjudicados, los compromisos con los docentes y peor administrados, se convirtieran en el calvario de los gobernadores, que no supieron tener humildad a la hora de tomar decisiones y de tratar a sus amigos.
A los periodistas de grabadora en mano, despreciados y vilipendiados, que miraban pasar la opulencia y la arrogancia vestida de frac, porque unos asesores arribistas le recomendaron al monarca que les cerrara las puertas ‘a esos muertos de hambre de los medios de comunicación’.
Vencida la arrogancia, empezara la angustia por responder ante los jueces de la república por contratos de único proponente que, como lo terminara diciendo muchos después con el título en su momento como él o la ex secretaria de que cartera (aún no sabemos cuál va ser pero siempre hay un escándalo donde esta ortega) Destrozando su vida, en su dignidad y en su honor, le ordenaron firmar los actos administrativos sus inmediatos superiores como condición para permanecer en el cargo.
Otra ex secretarios, inducida a error, prefirió renunciar antes que comprometerse con la violación de las normas del Código Fiscal pero son cosas que pasan en todos los gobiernos cuando tan solo van con el afán de mantener el poder y el revanchismo a los políticos olvidándose del pueblo que lo elige
Lo mismo puede decirse de los alcaldes, que llenos de vanidad y hartos de poder, trataron con desprecio a los trabajadores de la prensa. Nunca antes al periodismo de Caucano lo habían irrespetado tanto, especialmente en la gobernación del Cauca y muchas alcaldías, donde ocurrieron los mayores estropicios en materia de contratación oficial.
Para evitar el contacto con los medios, trajeron unos asesores gordos y arrogantes que pasaron por encima de las organizaciones gremiales del periodismo, para centralizar en el norte del Cauca la inversión publicitaria, los cuales se voltearon apenas empezó la campaña electoral del candidato ungido por Ortega y su jefe Campo
Alguien muy respetable, ‘un gran líder de la justicia social’ Jaime Mosquera Gómez, mi abuelo me hizo escribir muchas veces en mi cuaderno de colegio mensajes impresos a letra alzada, recomendando la humildad como principio y fin de la administración pública.
“Debes ser humilde cuando te vean subir, para que no te traten con desprecio cuando te vean bajar” era la recomendación que siempre me resaltaba mi viejo que ya fallecido pero me dejo claro en esas palabras el detalle de cómo debe ser los seres humanos y sobre todo un ser publico
La noticia, según la cual ha sido citado el señor gobernador Oscar Campo ante la forma que en este momento maneja su celular y citas obligando a que voten por el candidato a la gobernación donde su jefe y actual socio Temistocles Ortega va ser el causante de su muerte Política, porque no le interesa que en un futuro sea la piedra al zapato, nos duele profundamente, aunque haya sido un ingrato con quienes contribuimos a su elección.
¡Porque apenas empieza su calvario! Vendrán muchas otras circunstancias en las que sentirá la ausencia de sus amigos, de aquellos que dejó tirados a la vera del camino.
Porque habiéndolo ayudado a elegir como mandatario de los caucanos, no supo tratar a sus aliados con la misma generosidad con la que nos comprometimos con su elección.
Entonces recordará a Luis Fernando Velazco, que tuvo la paternidad responsable de su candidatura a la gobernación; a Carlos Julio Bonilla y a Crisanto Piso (aunque este último con cara gana , con sello gana como es costumbre) ; a los periodistas que murieron por inanición en estos cuatro años de su administración y a este medio de comunicación, que ha librado todas las batallas, en medio del desierto, pasando por los campos minados por la envidia caucana que se da silvestre en nuestro departamento.