En la tarde de este sábado todos sus seguidores y familiares le dieron el último adiós al Rey del Despecho, luego de tres días de estar en cámara ardiente para que sus fanáticos llegaran a despedirse.
Sin embargo, se conoció que fueron registrados varios disturbios durante el entierro en el cementerio Campo de Paz en Medellín.
Todo empezó porque la familia quería que fuera un momento privado para ellos y realizar su despedida en la Iglesia Santa Gema. Algunos intentaron entrar, pero no fue posible, solo estaban autorizados los medios de comunicación para transmitir cada segundo de la ceremonia.
A pesar de esto, algunos no respetaron la decisión y empezaron a tumbar las vallas de seguridad. Debido a estos hechos, el Esmad tuvo que intervenir y lanzar gases lacrimógenos.