En la medida que Aumentan los Salarios, se Produce el efecto Inflacionario sobre los Bienes y Servicios que se tienen para la Venta
Un precio, un costo, un valor en sí mismo, no tiene un significado de grande o pequeño, caro o barato. Era el caso de los indígenas de Colombia que estaban bañados en oro, pero no era comparado con nada, solo era un adorno más. Sí, tenía un gran valor de cambio la sal, que era medio de pago para las transacciones comerciales, que tazaba la apreciación del trueque.
Cuando llegaron los españoles, el oro, tomó el significado de grandeza porque ya era para los chapetones del viejo continente, una mercancía, con la cual se obtenía riqueza y por tanto era un medio de pago de excelente importancia.
Esta pequeña entrada de la economía de la colonia de América, la sacó a relucir para darnos cuenta, que las cosas son caras o tienen un gran incremento, solo si la comparamos con otra variable.
Este es el caso de los incrementos salariales, en donde podemos apreciar que muchos intereses individuales, ven un aumento como un factor de desastre económico o el acabose de las empresas. Este concepto no es cierto.
En la medida que aumentan los salarios, se produce el efecto inflacionario sobre los bienes y servicios que se tienen para la venta, que, al fin, siguen llevando la misma proporción. Por lo regular el costo de la nómina de las empresas privadas va, entre el 2.5 y el 3 por ciento de las ventas, que es la consideración que debe hacerse para hablar de las cosas caras.
Si la empresa sigue vendiendo año tras año, sin aumentar el precio de los servicios que ofrece, podrá llegar el momento en que este costo no sea del 3%, sino que suba a un 5 o 6 %, y esto ocurriría si el aumento de salario fuese el doble de los que se está pagando actualmente.
Miremos el ejemplo: La empresa mediana en Colombia puede vender unos 30 mil millones de pesos en el año. Su nómina es del 3%, o sea novecientos millones de pesos. Si la empresa vende la misma cantidad de productos con un incremento del 10%, estaría poniendo al público la suma de 33 mil millones.
A los empleados se le aumenta el 10% o sea la nómina vale ahora 990 millones. Si dividimos 990 millones entre los 33 mil millones de pesos, vemos que la cifra es igual al tres por ciento. No existe ningún perjuicio patrimonial y si, la clase trabajadora tiene un mejor ingreso para adquirir la oferta de la empresa. Los factores del crecimiento empresarial, van más allá del solo costo de la nómina.
Se agrega la productividad, que consiste en hacer las cosas con la mejor calidad en el menor tiempo posible. Agreguemos la parte del mercadeo en donde se deba optimizarla mejor rotación de inventarios. No le pongamos el diablo al trabajador o al salario, más bien pongámosle un ángel a la excelencia gerencial.