EL MEJOR EJEMPLO DE RECONCILIACION EN EL CAUCA

Hace 26 años, el 9 de marzo de 1990 se firmó el primer acuerdo de paz contemporáneo en Colombia. Ese día en lo alto de las montañas del Cauca, Carlos Pizarro, máximo comandante del Movimiento 19 de abril (M-19), dio una orden sencilla pero de gran importancia para la historia de Colombia: “¡Combatientes, dejad las armas!”.

El M-19 dio ese paso audaz hacia la paz en momentos en que la sola idea de poder hablar de una negociación política era algo considerado entre las guerrillas como traición a los ideales revolucionarios.

Los colombianos que vivimos ese proceso podemos dar fe de las enormes dificultades que enfrenta un proyecto revolucionario armado para pasar de la guerra a la paz y estamos seguros que el M-19 no equivocó el camino que por primera vez inició en Latinoamérica y que hoy recorren, en su propio contexto y condiciones las FARC.

Hoy por eso decimos a los colombianos que tomando como referencia esa experiencia de Paz, tengamos confianza en el proceso actual, para que en el próximo futuro también el ELN y otros grupos lo transiten exitosamente.

Esa oportunidad de paz para el pueblo colombiano en la década de los 90, contó con el apoyo ciudadano, algo que es necesario para que la paz tenga nuevos desarrollos y sea sostenible.

La Constitución Política de 1991 y los aportes que desde el Gobierno Nacional y local, el Congreso y otras instituciones han hecho desmovilizados de 1990, son claros ejemplos de lo que puede ganar una sociedad cuando decide de manera dialogada poner fin a un conflicto armado.

Como ayer estoy convencido que desarmar los espíritus es posible y convoco a los Caucanos que hemos sufrido de las peores maneras la guerra, a invocar del resto de Colombianos su apoyo solidario al plebiscito por la Paz, y garantizar de esa manera poder soñar y vivir un futuro en armonía como el mejor legado que podemos dejar a nuestros hijos y siguientes generaciones.

FABER MUÑOZ

Por el Cauca soy caPAZ