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El papa Francisco alertó de que existe aún el riesgo de una guerra nuclear en el mundo y pidió a los científicos que se unan en una voluntad común de desarme y en una fuerza para la paz.
«Los riesgos para las personas y el planeta son cada vez mayores. San Juan Pablo II dio gracias a Dios porque, por la intercesión de María, el mundo se había salvado de la guerra atómica. Desgraciadamente, debemos seguir rezando por este peligro, que debería haberse evitado hace tiempo», dijo Francisco.
» No sólo se intensifican los conflictos anacrónicos, sino que resurgen los nacionalismos cerrados, exagerados y agresivos y las nuevas guerras de dominación, que afectan a los civiles, los ancianos, los niños y los enfermos, y causan destrucción por doquier. Los numerosos conflictos armados son muy preocupantes. Dije que era una tercera guerra mundial a trozos , hoy podemos decir total «, añadió.
En su encuentro con científicos de todo el mundo, el Papa Francisco subrayó que «es necesario movilizar todos los conocimientos basados en la ciencia y la experiencia para superar la miseria, la pobreza, la nueva esclavitud, y evitar las guerras».
«En nombre de Dios, que ha creado a todos los seres humanos para un destino común de felicidad, estamos llamados hoy a dar testimonio de nuestra esencia fraterna de libertad, justicia, diálogo, encuentro mutuo, amor y paz, evitando alimentar el odio, el resentimiento, la división, la violencia y la guerra», añadió el Santo Padre.
