El Sumo Pontífice junto al presidente Juan Manuel Santos, alabó los avances hechos en el proceso de paz y recordó que “la pobreza genera violencia”.
En el discurso pronunciado por el Papa Francisco en la Plaza de Armas del Palacio de Nariño, ante el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, representantes de la oposición, dirigentes empresariales y sindicales y cerca de un millón de personas apostadas en la Plaza de Bolívar, el Prelado de Roma formuló un contundente apoyo al proceso de paz del gobierno colombiano con las guerrillas de las Farc y el ELN y pidió no caer en la “tentación de la venganza”, ni “los intereses particulares”.
En su profundo discurso también les advirtió a los colombianos que la pobreza “genera violencia” por lo que los exhortó a resolver sus “causas estructurales”.
Esto sucedió este jueves durante el llamado Encuentro con la Autoridad, en la Plaza de Armas de la Casa de Nariño, sede del gobierno, en el segundo día de la visita del pontífice al país.
“Este encuentro me ofrece la oportunidad para expresar el aprecio por los esfuerzos que se hacen, a lo largo de las últimas décadas, para poner fin a la violencia armada y encontrar caminos de reconciliación”, dijo el Papa.
Convivencia pacífica
En un enérgico respaldo a los procesos de paz, uno firmado con las Farc y el otro en conversaciones con el ELN, señaló que “en el último año ciertamente se ha avanzado de modo particular; los pasos dados hacen crecer la esperanza, en la convicción de que la búsqueda de la paz es un trabajo siempre abierto, una tarea que no da tregua y que exige el compromiso de todos.”
“Trabajo que nos pide no decaer en el esfuerzo por construir la unidad de la nación y, a pesar de los obstáculos, diferencias y distintos enfoques sobre la manera de lograr la convivencia pacífica, persistir en la lucha para favorecer la cultura del encuentro, que exige colocar en el centro de toda acción política, social y económica, a la persona humana, su altísima dignidad y el respeto por el bien común”.
“Todos somos necesarios”
Al tiempo que exhortó a los colombianos a “poner la mirada en todos aquellos que hoy son excluidos y marginados por la sociedad, aquellos que no cuentan para la mayoría y son postergados y arrinconados. Todos somos necesarios para crear y formar la sociedad. Esta no se hace sólo con algunos de ‘pura sangre’, sino con todos”.
Previamente, el presidente Santos le había agradecido a Francisco “por venir a este tierra fértil y hermosa, a acompañarnos, a estimularnos, a dar con nosotros el primer paso hacia la reconciliación”, y señaló que “de nada vale silenciar los fusiles, si seguimos armados en nuestros corazones. De nada vale acabar con la guerra, si nos vemos los unos a los otros como enemigos”.
Con los obispos
En el encuentro con los obispos colombianos el Sumo Pontífice saludó con un “La paz esté con ustedes”, para luego seguir con “Así saludó el Resucitado a su pequeña grey después de haber vencido a la muerte, así consiéntanme que los salude al inicio de mi viaje.
Agradezco las palabras de bienvenida. Estoy contento porque los primeros pasos que doy en este País me llevan a encontrarlos a ustedes, obispos de Colombia, para abrazar en ustedes a toda la Iglesia colombiana y para estrechar a su gente en mi corazón de Sucesor de Pedro.
Les agradezco muchísimo su ministerio episcopal, que les ruego continúen realizándolo con renovada generosidad. Un saludo particular dirijo a los obispos eméritos, animándolos a seguir sosteniendo, con la oración y con la presencia discreta, a la Esposa de Cristo por la cual se han entregado generosamente.
Vengo para anunciar a Cristo y para cumplir en su nombre un itinerario de paz y reconciliación. ¡Cristo es nuestra paz! ¡Él nos ha reconciliado con Dios y entre nosotros!”
Por: Enrique Narváez Benítez.
Periodista/ELFRENTE.COM.CO