El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, es la nueva víctima de la ‘justicia espectáculo’, que busca castrar la carrera política de grandes e inmaculadas figuras de la política nacional, para presentarlas como trofeos ante la opinión pública, ávida de resultados judiciales en las investigaciones contra la corrupción en Colombia. Para producir este golpe de opinión, un funcionario subalterno de la Fiscalía General dictó medida de aseguramiento contra el mandatario antioqueño, que hace ocho años, durante el período 2004 -2007 y en su condición de gobernador, justificó plenamente y con razones jurídicas, el reajuste del contrato para la pavimentación de la carretera troncal de La Paz, una vía que atraviesa una fuerte topografía y cuyas obras han requerido grandes recursos de la nación y el departamento.
Debido a la medida de privación de la libertad que emitió la Fiscalía General de la Nación contra el Gobernador de Antioquia Aníbal Gaviria, las reacciones políticas no se hicieron esperar. Al respecto, el presidente de la república, Iván Duque Márquez manifestó su solidaridad con el gobernador, pero aseguró que respeta la decisión de la Fiscalía. «Respeto la institucionalidad. He conocido y trabajado con el doctor Aníbal Gaviria durante años; le tengo un profundo respeto, reconocimiento y aprecio. Mi solidaridad con él y su familia», indicó el Jefe de Estado.
Cabe resaltar que, debido a esta medida, el presidente Duque deberá apartar del cargo al gobernador Gaviria y designar temporalmente un nuevo mandatario departamental encargado en Antioquia. “Me duele mucho la decisión sobre el Gobernador Aníbal Gaviria, me duele por Antioquia, por su familia, por él. Nuestros deseos que pueda superar con éxito esta dificultad”, expresó también el expresidente Álvaro Uribe.
Han sido varios los mensajes de apoyo que ha recibido el gobernador de Antioquia de parte de distintas personalidades y ciudadanos, aun de los jefes de los partidos de oposición al gobierno nacional. Por lo que su esposa, la gestora social del departamento resaltó el trabajo y dedicación que ha tenido Gaviria en su carrera pública. “Soy testigo del amor de Aníbal por Antioquia, de su responsabilidad con cada habitante del departamento, del ejemplo que ha significado para mí y para mis hijos, de su transparencia, entrega y dedicación”.
La trayectoria de Aníbal Gaviria Correa y su perfil de líder nacional, se han labrado a punta de sacrificio y del riesgo de la propia vida. La medida de aseguramiento para que responda por hechos administrativos que pudieron ocasionar daño al patrimonio público, se produce siete años después de haber ocupado por primera vez la gobernación de Antioquia. Es una determinación cargada de odio, de resentimiento y de venganza, como si existiera el propósito recóndito de cerrarle el camino hacia la presidencia de la república. Nada más peligroso para la seguridad institucional que las medidas precipitadas de un funcionario recién posesionado, mal aconsejado, que toma determinaciones sorpresivas, como si en realidad se tratara de funcionarios de alta peligrosidad, que pueden tipificar un ‘abuso de autoridad.
Si la carga de la prueba no está suficientemente fundamentada en este delicado asunto, será inevitable que el país indemnice al gobernador Gaviria Correa por los daños morales y materiales ocasionados a este funcionario y a su familia. No solamente con pedirle perdón al inocente se remedia una situación de esta naturaleza, donde el fiscal general se juega su futuro mientras maltrata una carrera política brillante de otro miembro de la familia Gaviria Correa, que ha colocado su cabeza en la guillotina judicial para que lo descuarticen.