Al cruzar la pierna se produce un desequilibrio corporal, se recarga y ejerce más peso en un lado que el otro. La columna y los músculos de la espalda tienen que compensar.
El cruzar la pierna es una postura adoptada en su mayoría por las mujeres, quienes se ven más elegantes en esta posición, sin embargo, esta postura trae varios problemas para el cuerpo humano.
El cruzar la pierna sobrepasa la línea media, pone la cadera en una posición que con el tiempo puede causar dolor. Incluso, en pacientes operados de la cadera no se aconseja debido a que puede luxar o hacer que se salga la articulación. Por otro lado, las personas tienden a llevar los hombros hacia adelante, entonces empeoran la postura.
También el hecho de tener una pierna sobre otra hace presión sobre un nervio llamado peroneo que va detrás de la rodilla. lo cual puede llegar a producir sensación de adormecimiento.
Así mismo, esa presión sobre la parte posterior de la rodilla puede interferir con la circulación, pero no es la causa de problemas serios. Puede sentirlo alguien que tenga ya algún problema de base como un aneurisma, varices.
Inclusive, hay estudios que dicen que aumenta la presión arterial.
Sin embargo, no debemos estigmatizar el cruzado de piernas. Una persona sana no sentirá sus efectos porque, cuando esta incomoda, ajusta su postura. Pero quien ya tiene problemas de cadera, espalda o circulación sí va a sentir más los efectos.
Por supuesto, hay otros factores de riesgo para estas condiciones y no se puede culpar solo al hecho de cruzar de piernas. En todo caso, hay que recordar que sentarse bien tiene su ciencia, que no hay que pasar mucho tiempo en la misma posición.